Consultoria de restaurantes
En nuestra labor como consultoría de restaurantes, en más de una ocasión nos hemos llegado a topar con propietarios que siguen pensando que el branding no es más que alguna moda pasajera que terminará por olvidarse y que si no hacen uso de ella, no afectara en nada a su empresa. Por fortuna, hemos podido orientar a todos ellos y demostrarles porque este proceso resulta tan trascendental para cualquier marca que quiere perdurar en el mercado actualmente.
Así como a ellos, el día de hoy queremos compartir contigo nuestra opinión de porque el branding resulta trascendental para una empresa, y más dentro del mercado de los restaurantes.
Primero que nada ¿Qué es el branding?
Antes de pasar a temas pesados, sería importante decir a groso modo de que se trata. Esta palabra se emplea dentro del marketing y es un anglicismo que hace referencia al proceso que se lleva a cabo para concebir y construir una marca. Dentro de ella se engloban no solo un diseño de imagen, sino todas las estrategias de comunicación que se deban emplear para trasmitir ciertos mensajes al público y que estos se queden presentes en su mente.
¿La marca es lo mismo que el branding?
La respuesta es: NO. Mucha gente que no esta familiarizada con los términos empleados con el marketing y publicidad tienden a confundir sus significados. La marca es, en términos simples, una percepción fundamentada de lo que eres, más allá de un producto o servicio. Es la percepción de valores, sentimientos y emociones que los clientes tienen respecto a lo que ofreces en el mercado. Una marca puede ser una persona, una empresa, un negocio, etc.
En cambio, el branding se encarga de ser una llave maestra, para llevar todo ese packing del que esta hecho la marca a las personas indicadas. son las acciones y estrategias no solo para diferenciarte de la competencia, sino para que los elementos intangibles de la identidad de tu marca se resalten.
¿Cómo se comienza a hacer branding?
Este sistema no comienza de la nada ni por accidente, tampoco tiene un efecto inmediato, sino que es como una pequeña semilla: debe plantarse y verse crecer para recoger sus frutos a largo plazo. Comienza como un proceso estructurado, un camino a seguir para obtener ciertos objetivos fijados previamente. Lo ideal para comenzar con el branding, sería poder contestar de la mejor formas las tres preguntas más importantes con respecto a la marca: ¿Por qué mi marca existe y debe importar a alguien?, ¿Cómo se puede relacionar e interactuar con la gente? y ¿Qué puedo y voy a ofrecer?